Estar de buenas es:
-Revisar los trabajos de tus estudiantes en dominguito, con un café, un cigarro y la certeza de ver cómo cada vez escriben y analizan mejor las cosas que les vas dando “pa que aprendan algo”.
-Ver In treatment o House con el Rul y la Caro y coincidir en que la televisión bien hecha es un gran pretexto para reunirse y charlar.
-Cenar en la nueva casa de mi primo y su esposa y recordar tanta cosa que hemos hecho juntos este par de treintañeros. Ah, y de paso, ver que mi abuela no está tan loca ni tan desconectada de la realidad como uno cree.
-Ver que mi jefe se ve bien de cincuentón, que su panza va bajando y que mi jefa se ve muy bien cuando se arregla con motivo de las cenas familiares.
-Intercambiar miradas con mi carnal Adolfo, volvernos cómplices (nunca lo habíamos sido como este año y estoy refeliz por ello) y reírnos en silencio a causa de la habitación matrimonial de mi primo, cuyo estilo “renacentista-tapatío-rococó” puede dar tema para largos ratos de cotilleo y mofa... (carrilla sana, queremos a mi primo).
-Chatear con July en domingo.
-Dormir dos horas en los jardines del ITESO.
-Que el Barcelona meta goles a lo pendejo.
-Leer Asfixia de Chuck Palahniuk.
-Chelear y filosofar con Julia y Marijou un día cualquiera entre semana e irte a dormir con esa sabrosa sensación en la panza provocada por las amigotas que tienes.
-Visitar el Festival de la Cerveza con el Ricardo, toparme con banda que hace años no veía y decir todos juntos: “¡saluuuuud! ¡¡¡Que chingue a su madre el gobierno del PAAAAN!!!”
-Comer gratis en Karne Garibaldi (quesadillas incluidas).
-Que se haya terminado el putí...mo horario de verano.
-Ver a MGMT en vivo!
-Escuchar una canción una y otra vez…
Estar de malas es:
-Ver que aún existe gente que cree que la guerra contra el narco que promueve el amado Felipe Calderón se puede ganar.
-Ver un partido de los Pumas.
-Tener que pagar la afinación del coche.
-Que mi pinche conexión a Internet se ponga mamona a cada rato.
-Que el euro haya subido tanto. ¡Coooooño!
-Darse cuenta de que algunos colegas profes tienen la ortografía de un tianguero (con perdón de los tiangueros).
-Cortarme chueco el cabello. Mi disculpa es: ¡no tengo ojos en la nuca chingado!
-Perder todos los partidos con mi equipito (sí, equipito) de la universidad.
-Leer la prensa local. Pobrecita ella, tan feíta, tan mal escrita, tan pueblerina... (suspiro).
-Y creo que ya… por esta semana.
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4 comentarios:
Jo, jo. Qué bonito post, que de verdad es lindo. Gracias por lo que a mí respecta.
Un abrazo.
El Rul.
Ay sii, yo tengo profesores que dicen cada cosa taaan pésimamente dicha, que hasta pienso íjole!! si estudiar así te deja, mejor no estudio!!
Veo que vuelves y disfrutas, que bonito!! Saluditos extraño!
Estar de buenas es:
- Ir al hospital de voluntaria y reencontrarme de nuevo con mi “antigua” profesión, ver a los niños que estarán a mi cargo, medirlos, pesarlos y pellizcarles la lonja pa’ ver qué tan gorditos están y cotorréarmelos.
- Descubrir una serie como “The Sopranos” y clavarme viendo mínimo, un capítulo diario por Internet, mientras como lo primero que se me cruce en la cocina.
- Preparar una cena con mis compañeras de piso, donde cada una pone lo poco que tiene en el refri y que salga una sopa bien güena y enjundiosa.
- Hablar con mis papás por teléfono y sentir que: ya no los extraño dolorosamente como los extrañaba hace un año y que aún así daría lo que fuera por recibir un rico apapacho.
- Tener muchas ganas de salir por la noche, terminar bailando con gente que me cae re-bien y conocer nuevas personas que solo conocía por su blog.
- Chatear con Enrique el lunes, martes, miércoles, jueves, viernes. Si incluye fin de semana, mejor.
- Hacerme mi café por la mañana en mi nueva cafetera y escuchar el agua cayendo por el filtro acompañado con olor rico.
- Ponerme calcetines cuando hace frío.
- Mandar mensajitos por celular o canciones por youtube.... y recibir contestación… y emocionarme cual quinceañera con acné facial.
Estar de buenas es:
- Ir al hospital de voluntaria y reencontrarme de nuevo con mi “antigua” profesión, ver a los niños que estarán a mi cargo, medirlos, pesarlos y pellizcarles la lonja pa’ ver qué tan gorditos están y cotorréarmelos.
- Descubrir una serie como “The Sopranos” y clavarme viendo mínimo, un capítulo diario por Internet, mientras como lo primero que se me cruce en la cocina.
- Preparar una cena con mis compañeras de piso, donde cada una pone lo poco que tiene en el refri y que salga una sopa bien güena y enjundiosa.
- Hablar con mis papás por teléfono y sentir que: ya no los extraño dolorosamente como los extrañaba hace un año y que aún así daría lo que fuera por recibir un rico apapacho.
- Tener muchas ganas de salir por la noche, terminar bailando con gente que me cae re-bien y conocer nuevas personas que solo conocía por su blog.
- Chatear con Enrique el lunes, martes, miércoles, jueves, viernes. Si incluye fin de semana, mejor.
- Hacerme mi café por la mañana en mi nueva cafetera y escuchar el agua cayendo por el filtro acompañado con olor rico.
- Ponerme calcetines cuando hace frío.
- Mandar mensajitos por celular o canciones por youtube.... y recibir contestación… y emocionarme cual quinceañera con acné facial.
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