domingo, 7 de junio de 2009

Lluvia, pizza, junio


Entiendo poco, pero lo que entiendo me gusta. Si alguien sabe francés, s'il vous plaît...

Ya lo había dicho por acá alguna vez: junio me gusta.

¿Primera obvia y egocéntrica razón? Nací en este mes, y la verdad es que me gusta haber nacido, pa qué mentir. Me gusta haber nacido en un día lluvioso, según recuerdan mis padres; me gusta haber nacido en Guadalajara, ciudad conservadora, puqueque a ratos, religiosa-católica, hipócrita (¿esto es un pleonasmo?), pero que me cae muy bien y a la que cada día le encuentro más el gusto y las ganas de estar por acá para meterle mano y transformarle poco a poco el rostro; me gusta haber nacido porque puedo escribir, y de vez en cuando lo que escribo es leído por alguien más, y la sensación de compartir las palabras y las ideas para mí es espectacular.

Podría pasar literalmente horas enunciando todas las razones por las que estoy feliz de haber nacido y no es el caso, así que me limitaré a decir que, a casi 32 años de haber aparecido por estos rumbos, junio se me sigue apareciendo para hacerme sonreír y recordarme que la lluvia es de lo mejor que hay, que en 32 años se pueden hacer muchas pendejadas y se puede herir a muchas personas, pero también se pueden compartir muchas mañanas en la cama, dar muchos besos, tomar muchas cervezas, gritar muchos goles, fumarse una noche entera con amigos, hacerse puma y culé, viajar lo más lejos que puedas y llorar solo en un parque en el que nunca volverás a estar o sencillamente darle la vuelta al calendario para descubrir que ya es junio otra vez, darte cuenta en ese momento de que ya avanzaste la tercera parte de tu vida y de que, frente a ese dato frío y crudo, eres completamente capaz de sonreír como cuando tenías 8 años y te iban a llevar a comer pizza y a comprar juguetes y sabías que lo mejor de "tu cumple" estaba por venir.

2 comentarios:

Ileana dijo...

Junio... mmm. Los mayores amores no xiliales de mi vida han llegado en un mes de Junio. Caballeros de la lluvia que en nuestra hermosa Guadalajara se combina perxecto con el olor a tierra mojada. Incluso mis lágrimas _ésas que no me están pidiendo permiso justo ahora para salir_, saben distintas porque saben a nostalgia, porque rememoran algunos de los momentos más hermosos y plenos que como mujer he podido saborear. Horas, minutos, segundos impregnados de magia. Deseos que germinan en un cuerpo de mujer y se hacen milagro en un cuerpo de hombre. Mi imagen que se rexleja en los ojos que saben sentirme además de observarme.
Sin haber nacido en Junio tal parece que estoy destinada a renacer en él. Supongo que haber nacido en la noche más larga del año me conecta con el mes que posee el mejor olor y sabor de cuantos hay. (Lo que menos me gusta de llorar son los mocos que gotean como locos)... estoy un poco triste. Junio también es un mes en el que he tenido que ver partir. Qué ganas de xumarnos y bebernos ésta y muchas más noches de Junio con los amigos! Eyy... si viene tu cumple puede ser otro gran motivo. Gracias por tu blog ;)

JULY dijo...

qué bueno que disfrutes tanto "tu" mes. Lo mejor de "tu" mes es que tu cumpleaños no se ve opacado por otras celebraciones masivas. Es el mes de Enrique, solamente (bueno, y de los demás que cumplen años que son celebrados por su parte, también). Qué chido, ahora Junio ya se puede significar algo para mí, porque antes era el mes que pasaba sin pena ni gloria.
Este año, ¿Te llevarán a comer pizza? ¿Y te comprarás algún juguete? ¿te harán tu pastel y gelatina de leche? ¿niño envuelto? ¿bolos, piñatas? ¿agua de jamaica en vasos desechables?
Felicidades por junio!